Alexander Alen Fernández

por **Alexander Alen** Dom Mar 21, 2010 3:45 pm

-Nombre de personaje: Alexander Alen Fernández
-Sexo: Hombre
-Fecha de nacimiento: 20.08.1993
-Edad: 16 años
-País de origen: España
-Localización: Gijón (Asturias)
-Situación laboral: Estudiante. Vive en la casa de sus padres.

-Descripción física:

Spoiler:

Pelo: Muchacho de cabellos rubios ceniza, los cuales lleva algo largos, con flequillo y de manera revuelta, con cada pequeño mechón apuntando en una dirección.
Ojos: De color ambarino/almendra, con pequeños tonos verdes y ligeras pinceladas rojizas, haciendo que puedan parecer que cambian de color cuando les da la luz o cuando se humedecen.
Contextura: Tiene un cuerpo bien desarrollado gracias al deporte que hace, pero simplemente se le marca ligeramente en el pecho y abdomen, así como parece tener brazos fuertes y espalda ancha. Todo esto lo disimula con la ropa que lleva.
Prendas: Su ropa varía bastante. Puede llevar desde unos pantalones cortos de deporte con una camiseta de tirantes, hasta un traje con corbata y zapatos de gala. Lo que más le gustan son las camisetas ceñidas a su cuerpo y los vaqueros pitillo, así como camisas de rayas y lisas que porta en todas las ocasiones especiales. Suele llevar un reloj en su mano derecha y un colgante en forma de luna.

-Descripción psicológica: Aunque no crea en el horóscopo, su signo cáncer coincide bastante con su forma de ser. Es un muchacho agradable, siempre con una jovial sonrisa en su rostro que amplifica sus rasgos finos y perfectos. Le gusta ser el líder de grupo, por ello es el capitán de su equipo de balonmano. Le gusta tomar la iniciativa sea en proyectos o en elegir a donde ir o decidir lo que va a comprar para sí mismo o para un amigo. Aunque suele tomarse las cosas en serio y pensar en lo que va a hacer o decir, tiene un lado para el humor. Le gusta hacer de vez en cuando alguna broma o decir cosas graciosas e incluso reírse con la de sus amigos.
Dejando de lado lo agradable, Alex también tiene un lado negativo. A la hora de encapricharse por algo, suele ser muy cabezota y cuesta sacarle de sus decisiones. Suele arrepentirse después de si ha hecho algo malo, pero es difícil cambiarlo. Es bisexual, le gustan tanto las chicas como los chicos.

Historia:

El 20 de Agosto de 1992 nació en el hospital de Montepríncipe en Madrid capital un niño de rubios cabellos y ojos amarillentos, con pintas verdes y ligeros surcos de color rojizo; de madre madrileña, veterinaria de animales exóticos y de padre argentino, sargento de policía. Cuando el muchacho cumplió los dos años, sus padres decidieron mudarse a Asturias, buscando un lugar menos colapsado y más sano para criar a su hijo. Azariel Alen, su padre, pidió el traspaso a la agencia de policía de la ciudad de Gijón, el cual le concedieron por ser ahora padre de familia. Su madre, Sandra Fernández, dejó su trabajo en el zoológico de Madrid para directamente abrir su clínica veterinaria en Gijón, estando siempre en la lista de veterinarios disponibles para viajar a examinar cualquier anomalía de algún animal exótico en cualquier punto del planeta, algo que le apasionaba verdaderamente.
Alexander cumplió entonces los tres años. Sus cabellos rubios destacaban entre una sociedad de cabelleras oscuras, y por ello, fue un niño que llamaba la atención de las personas ancianas del barrio, que le llamaban y le mimaban. Sus padres le inscribieron en el colegio del barrio, donde aprendería todo lo básico que un muchacho debería saber. Alexander comenzó entonces a hacer amigos y empezar su largo camino de estudiante.
Allí conoció a sus mejores amigos: Kevin, Aitor y Héctor; y por supuesto, a sus amigas, aunque estas no hicieran nada en su vida que recalcar. Con ocho años de edad, los cuatro decidieron apuntarse a una actividad extraescolar que ocuparía parte de su tiempo libre, balonmano. Sintieron curiosidad por este deporte gracias a que el hermano mayor de Aitor era jugador de uno de los equipos del colegio y a que el hermano de Kevin era entrenador de uno de estos grupos de niños y niñas. Los cuatro amigos comenzaron entonces como benjamines de primer año, y pronto descubrieron que no se les daba nada mal.
Los años siguieron pasando. Aitor y Héctor dejaron el balonmano, ya que parecía que no era la suyo. El primero se mudó a otra provincia, mientras que el segundo, tras un enfrentamiento con Alexander, se alejó del grupo y comenzó a tener otros amigos muy diferentes a ellos. Kevin, sin embargo, se mantuvo fiel a la amistad con Alex, y ambos comenzaron el instituto juntos. Gracias a la suerte, les tocó en la misma clase y pronto comprobaron que eran los únicos de su colegio en aquél aula, pero para nada afectó sus ganas de hacer más amigos.
Primero de la eso, segundo... y tercero. Alexander, con quince años ya, se había hecho ya un muchacho maduro, sabiendo que hay en la sociedad y que puede ser una mala o buena influencia. Comprobó ya los grupos que había en el instituto y como su amistad con Kevin no había cambiado. Pudo observar también como Héctor se había vuelto un macarra, metido en las drogas, en fin, como había destrozado su vida en el momento que se había juntado con aquellas gentes tras discutir por una chica que no estaba interesada por ninguno de los dos.
Del grupo con el que salía ahora, Kevin y él eran los más pequeños. Descubrió como era salir por las discotecas, lo que era ‘’el alcohol’’ y que su instinto sexual era distinto a lo que él pensaba. No podía evitar mirar a los chicos aparte de a las chicas y sentir cosas que debía ocultar a sus amigos por miedo a represalias. Un día, en la discoteca, recibió su primer beso de una muchacha un tanto mona, pero no pudo evitar marcharse de la discoteca un poco nervioso y azorado. ''Es un mierdas'' dijo uno de sus amigos a Kevin. Éste simplemente frunció el ceño, un poco preocupado.
Al día siguiente, Kevin quiso hablar con Alex. Él era su mejor amigo y le preocupaba lo ocurrido. Alexander, tras dudar unas largas horas, le contó lo que había pasado: le había gustado, sí, pero se había marchado un tanto asustado por ser su primera vez. Además le acabó confensando que además de gustarle las mujeres... también sentía atracción por los hombres. Kevin no hizo más que aceptarlo y le dio un abrazo. Kevin no era homosexual, pero él era su amigo y jamás cambiaría nada entre ellos dos. Alex agradeció muchísimo aquél gesto.
Por las tardes, tres días a la semana, siendo ya infantiles de segundo año en el equipo de balonmano de su colegio, seguían entrenando con duro esfuerzo. Alexander jugando como extremo y lateral derecho gracias a que era zurdo y Kevin como central. Hacían un gran equipo.
Llego entonces cuarto de la eso. Se encontraban en la discoteca, a la cual habían acudido cada fin de semana con su grupo. Eran ya las doce de la noche y el alcohol recorría ya el cuerpo de ambos muchachos. Kevin se encontraba bailando en la pista con una pareja de muchachas, mientras Alexander observaba a un chico desde la barra, bebiendo su cacharro de vodka negro. Fue hasta Kevin a comentárselo y el amigo le dio ánimos para que lo intentara y le entrara. Alexander, influenciado por el alcohol, no era casi consciente de lo que aquello de podría acarrear en una sociedad como la suya. Se acercó al muchacho, el cual le recibió con una cara de duda y tras un intercambio de palabras, Alex le intentó entrar. Aquél chico, azorado, le metió un buen empujón. Alex cayó hacia atrás, pegándose un bueno golpe en la espalda. ‘’Maricón de mierda, no te atrevas a acercarte a mí de esa manera. Puto gay’’ gritó con voz apagada por la música, dándole una fuerte patada en un costado. Kevin acudió al auxilio entonces, pegándole un puñetazo en la mejilla a aquél muchacho, comenzando entonces una batalla entre ambos grupos de amigos y los dueños del bar. La policía acudió al entuerto, llevándose detenido a los dos amigos, un par más de su grupo y tres del otro. Azariel, su padre, que trabaja en aquella comisaría de policía, se quedó totalmente sorprendido al descubrir a su hijo en una celda junto a Kevin. La bronca que recibió es mejor no contarla.
Desde ese día Alexander decidió ocultar su atracción por los chicos por miedo a recibir otra tanda de golpes como las de esa noche. Kevin, sin embargo, le tentaba a contarlo, que no pasaría nada más como lo de aquél día, pero Alex negaba todo. No quería volverse a meter en problemas y menos que Kevin interviniera y volver a la comisaría. Tampoco volvería a beber. Además de ser malo para su sueño, ser un alto jugador de balonmano, sus efectos de sinceridad no le habían gustado nada.

Actualidad:
Ahora se encuentra en primero de bachiller, estudiando humanidades junto a Kevin. Ambos son ahora juveniles de primer año en balonmano, jugando en uno de los mejores equipos de Asturias, en el que habían estado desde que comenzaron a jugar.
Por reyes de este año, Alexander recibió de regalo una mascota, un caniche toy al que llamó Crash, con el que está muy contento. Además, su madre está de viaje en Australia, en un zoológico donde han pedido su ayuda.

-Aficiones/Manías: El balonmano es su vida, por ello casi no puede contarse como afición. Le gusta también el manga y el anime, así como otras cosas freaks que le gusta comentar con gente que sabe del tema y que le parece mal cuando alguien les critica porque le guste eso. Otra afición podía ser la PlayStation, y con ellos famosos juegos como Final Fantasy y Kingdom hearts. No le gusta el futbol, quizás ponerse feliz cuando su equipo local gana un partido, pero para nada más. Escuchar música y cantarla podría llamarse también afición, así como ir al cine o salir con sus amigos por la tarde y a las discotecas.
¿Manías? Si con ello se hace referencia a lo que no le gusta, podría decir las corridas de toros y el maltrato animal. La corrupción política y como está evolucionando su país es algo que le desagrada, pero por suerte, la crisis no ha afectado al empleo de sus padres y los gastos en su familia no han variado. Otra cosa que odia son las arañas, además de que les tiene fobia. No puede evitar sentirse inseguro y asustado cuando una de ellas se encuentra cerca de él.

-Creencias religiosas: No cree en nada en sí, tan solo ligeras ideas de lo que podría haber tras la muerte y quien podría haber allí arriba, pero nada en lo que creer ciegamente. Algo hay, pero no se puede saber el qué.

-Aspiraciones: Aspira a ser jugador profesional de balonmano en la selección española como lateral derecho, pero piensa estudiar carrera de profesor de educación física y quizás como entrenador si su sueño de convertirse en jugador internacional no llega.

por **Girasol** Dom Mar 21, 2010 4:44 pm

Ficha aceptada
Una historia muy completa y bien expresada; ideas claras y descripción bastante buena. Una ficha bien completa. Ahora puedes ir a "El umbral" a postear la prueba y se rmiembro del foro.

Alexander Alen Fernández

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Re: Alexander Alen Fernández